
Por eso
y más debemos reconocer al niño-niña como un ser sexuado con relación
a si mismo y con otros y así construir una identidad propia.
La sexualidad es una de las puertas a través de la cual ellos desarrollan su
personalidad y su relación con la afectividad. Los juegos sexuales son
parte del desarrollo sexual normal del niño-niña, nunca debemos
regalarlos o castigarlos por las conductas normales y naturales de ellos.
Los/as niños-niñas deben de tener un desarrollo normal mediante el
descubrimiento de las partes de su cuerpo,la autoexploracion,el contacto
afectivo( besos,abrazos,etc. ), el darse cuenta de su propio sexo, la
diferencia sexual entre hombre,mujer,niño,niña ,los roles de.géneros
etcétera.
Los contenidos sexuales pueden influir en las manifestaciones de los
niños-niñas en éste tema considerando que ellos aprenden imitando todo
lo que ven en su entorno(padres,televisión,bailes,ropas eróticos de
moda,etcétera).
El culto de la belleza,al físico y la seducción en los medios
de comunicación no distinguen la edad de su público; Pero, estamos
preparados y capacitados para hablar de ésto con nuestros hijos? Podemos
manejar lenguajes que ellos comprendan?; ó les estamos dejando el rol de
padres a las redes sociales,televisión, centros educativos,amistades o las
experiencias que se les presenten.
Por ésta y otras razones es que hoy en día vemos a tantos adolescentes
desubicados,confundidos,y perdidos en la identificación de su sexualidad
teniendo relaciones sexuales a temprana edad y siendo objetos de abusos
por personas cercanas y/o familiares; por tal motivo debemos tener un
constante conversatorio desde temprana edad con nuestros hijos sobre
sexo votando los tabúes y rompiendo esos muros que parecen estar y no
nos tener y mantener la confianza padres-hijos-amigos y que por
miedo,vergüenza,costumbres,religiones,falta de confianza en nuestra
capacidad de ser guías lo que hacemos es alejarnos de ellos y con ésto lo
lanzamos al abismo de la indagación propia provocando resultados que
nos traerán dolores de cabeza.
Debemos ser un canal abierto de
comunicación con nuestros vástagos siendo el filtro de las informaciones
que interfiere en forma general a nuestros hijos.
Padres recordemos que somos el espejo en el que se reflejan nuestros
niños.
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