La vida no es para complacer a todo el mundo, de ser asi quedariamos locos, si es para vivirla sin hacer , o mejor dicho haciendo el menor daño posible a los demás, siempre habrá una decisión que afectara a alguien. En la actualidad estamos muy apresurados emitiendo juicios de valores sobre otras personas sin darnos la oportunidad de conocerlos, o de investigar el por que hizo tal o cual cosa. Es producto de la ignorancia en la que estamos sumergidos por un concepto errado del uso del conocimiento. Muy complejo es realizar análisis, mas si los intereses están por el medio.
Dificil,complicado, hostil y vil se convierte el mundo cuando la comunicación se rompe por el lado más débil, evidenciado la esencia de personas que critican el esfuerzo de quienes solo hacen su trabajo de manera honrada y honesta. Aprendamos a preguntar, si tenemos dudas, a preguntar si no estamos conforme, a preguntar si nos encontramos vacios, a preguntar para llenar esos huecos que nos resaltan la inseguridad, la rabia, el ego y la poca inteligencia emocional.
Antes de responder en el medio de la ira, bebamos agua, pensemos un poco, si vale la pena responder lo hacemos y sino la mejor elección es dejar pasar. Solo el tiempo pone las cosas en su justo lugar. Pongamos al ser humano por encima de todo, al final en este mundo de Jehova una mano lava la otra, y nos necesitamos TODOS. Quien no nació para la critica debe mantenerse guardado en su casa y cambiar de ambiente, profesión u oficio.
Que el cristal por donde mires la realidad, sea cual sea, procura que sea limpio y transparente como tu alma, porque nadie da lo que no tiene, ni mira desde otra óptica que no se del material que esta constituido su corazón.
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