-Mírate desnuda con los brazos hacia abajo y frente al espejo; observa si hay cambios en la forma de tus senos.
-Sube los brazos; sigue observando tus senos, pezones y axilas para ver si hay cambios.
-Coloca las manos en la cintura. Sigue mirando si aparecen cambios.
-ahora acuéstate y con una almohada debajo de tu hombro izquierdo, coloca tu mano izquierda debajo de tu cabeza y con la otra chequea el seno izquierdo y la axila para ver si encuentras algún cambio o señal. Haz lo mismo en el otro lado contrario.
-Por ultimo, levanta un brazo con la mano contraria aprieta el pezón suavemente para ver si tienes algún liquido que no se relaciones con la lactancia. Haz lo mismo en el lado contrario.
Fuente: Area VII de Salud
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