Aprendí mucho de Kobe Bryant. Era naturalmente dotado, pero tenía una pasión por el baloncesto como nadie más que haya visto. Su ética de trabajo era impecable y su énfasis en dominar los fundamentos es lo que lo elevó al jugador que era. Nunca he conocido a nadie más centrado con un enfoque miope. No buscó aprobación, afirmación o adulación. Persiguió la excelencia y el proceso. Siguió mi carrera y solía llamarme para ayudarme con mi salud, mi rutina diaria ... e incluso hablaba sobre técnicas de bateo. Él fue un modelo a seguir para mí y millones en todo el mundo.
Nos conocimos de adolescentes. Seguimos caminos similares. Pasamos de la secundaria a los profesionales y nuestras hijas crecieron juntas. La gente no lo sabe, pero él era mi entrenador secreto. Me empujó y me motivó, especialmente hacia el final de mi carrera cuando más lo necesitaba. Él siempre estuvo ahí. Incluso después de nuestros días de juego, él estaba allí para mí. Asistió al último espectáculo de @ Jlo en Las Vegas. Apareció en el podcast TheCorp.
La última vez que lo vi fue hace unos meses. Recordaré lo que me dijo sobre lo mucho que amaba a Vanessa y a sus hijas, y que continuó diciendo que no al 99 por ciento de las ofertas, eligiendo pasar el mayor tiempo posible con su familia.
Recordaré su grandeza. Recordaré su guía. Recordaré su amistad. Recordaré que él me hizo una mejor persona.
Su hija de 13 años, Gianna, seguía los pasos de su padre. Ella era amable, inteligente, cariñosa y iba a ser una estrella.
Descansa en paz, Kobe. Descansa en paz, GiGi. Mi corazón y mis oraciones están con la familia Bryant y las familias de los pasajeros. #AlexRodriguez(Traducido al español)
